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Cuando comemos muy rápido también tendemos a ingerir aire y gases que pueden almacenarse en el tracto digestivo, en especial en el intestino lo que muchas veces causa flatulencias; pues ciertos compuestos que hay dentro de las ventosidades proceden de la descomposición y procesamiento de alimentos durante la digestión algunos liberan nitrógeno y metano, responsables de los olores fuertes que más de una vez pueden llegar a causar vergüenza.

No todos los gases ingeridos se convierten en ventosidades o eructos, algunos incluso pueden diluirse  dentro del cuerpo, puntualmente en la sangre como sucede con una pequeña porción del oxígeno, cuando hay exceso de gases intestinales o se tienen dietas ricas en alimentos que tienden a fermentarse al no ser bien digeridos aparece un exceso de gases debido a que la capacidad de la flora intestinal para ayudar en las funciones normales no siempre es suficiente. Cuando se presenta baja movilidady absorción intestinal también existe la posibilidad de que se presente una condición comúnmente llamada meteorismo que puede llegar a causar dolor, distensión y ruidos en el área abdominal. 

Las personas ansiosas o que son intolerantes a ciertas comidas como la leche o los champiñones también pueden presentar exceso de ventosidades al ingerir las comidas que los afectan.

Cómo evitar los gases intestinales

Mastica bien cada bocado y trata de no tragar aire, evita las gaseosas, carbohidratos de difícil absorción intestinal como los azúcares dietéticos y el chicle, cuida tu ingesta de grasas y fibra, revisa si tienes alguna intolerancia a un alimento algunos granos como los fríjoles generan más flatulencias que otros. Por ejemplo muchas personas  que tienen problemas de irritable generan una tendencia a acumular gases intestinales al comer harina de pan o levaduras.