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No todo el pan es bueno, y no todo el pan es malo. Para saber si este delicioso alimento realmente es bueno para nuestro cuerpo es importante conocer un poco acerca de su contenido nutricional y cómo actúa en nuestra dieta.

 

El pan hace parte del grupo de tubérculos y cereales debido a que está hecho de harina de trigo.  Son ricos en hidratos de carbono, los cuales tienen un papel fundamental en la dieta diaria. En una alimentación balanceada, la ingesta de carbohidratos ayuda a generar la energía necesaria para que el cuerpo pueda realizar sus actividades cotidianas. Son la fuente principal de energía que necesita el cuerpo, deben consumirse alrededor de 100 gr diarios de carbohidratos, los cuales producen menos calorías que las grasas (1gr de hidratos de carbono produce 4 calorías mientras que 1gr de grasa produce 9 calorías).

 

Los panes que son hechos con harinas integrales tienen un alto grado de fibra al igual que si son elaborados con grano entero. La fibra, ayuda al organismo a mejorar la digestión, controlar los nieles de azúcar y colesterol y también ayuda a evitar el estreñimiento. Además, los carbohidratos tienen dentro de sus componentes moléculas de azúcares que son usadas por la glucosa como única fuente para alimentar las células de la sangre ya que no las pueden obtener de otros sustratos como la grasa o las proteínas. Esto contribuya a un buen funcionamiento del sistema nervioso y son recomendados para disminuir el estrés o la ansiedad.

 

Escoger bien, te hace bien.

 

El consumo de una rodaja de pan aporta al cuerpo menos de 100 Kcal, lo cual lo podemos comparar con las calorías de una fruta como la manzana, lo q equivale a solo el 5% de la energía que el cuerpo necesita para trabajar durante todo el día. Pero no todo el pan que se consume tiene la misma cantidad de calorías. Algunos panes están hechos con mucha mantequilla, aceites, rellenos de sabor como chocolate y bocadillo, entre otros que ayudaran a aumentar el número de calorías consumidas de manera exponencial y alarmante. Estos tipos de alimentos aunque son antojos y saben muy bien, seguramente su alto consumo proporcionará grasas indeseadas en nuestro cuerpo. 

Saber elegir qué pan tiene menor concentración de grasas y conservantes es fundamental para lograr una dieta que lo incluya sin problema. El pan integral es una excelente opción para consumir, además de las  propiedades la fibra que mencionamos antes, ahora vienen en presentaciones con avena y frutos secos, que proporcionan al cuerpo nutrientes adicionales.

 

¡Ahora que lo sabes, disfruta una buena rebanada de pan y no sientas remordimientos!