2017-08-09
Descubre sus talentos y potencia actividades en ellos.
Desde muy pequeños los niños empiezan a mostrar afinidades a cierto tipo de cosas, unos desarrollan gustos por la música y el canto, otros por los deportes y la exploración, otros por la actuación y la expresión corporal. Son varios los tipos de inteligencia que desarrollan los niños y una de las formas de potenciar estas habilidades en descubriéndolas con ellos mismos. Pregúntale a tu hijo cuáles son sus gustos y realiza actividades que lo ayuden a explorar más ese campo. Si le gusta el arte por ejemplo, ayúdalo con clases de pintura o trabajo en arcilla. Si le gusta correr y estar activo todo el tiempo, mételo a algún deporte que le guste. Si su interés es lo científico, llévalo a centros educativos donde pueda crear y hacer cosas nuevas.
Felicítalos y reconoce sus logros.
Aumentar su confianza será un punto clave en su desarrollo social. Es importante que el niño entienda cuándo merece una felicitación y cuando no, ya que la adulación constante puede hacer que no diferencie entre lo que está bien y lo que no. Felicitarlo por sus logros aumenta la autoestima y refuerza su seguridad, se puede comenzar con cosas sencillas como el que recoja sus juguetes solo, aprenda a ir al baño, se coma todo lo que está en el plato o que comparta sus juguetes con alguien más o ayude a hacer cosas de la casa. Recordarle lo orgullosos que nos sentimos de ellos por cosas como estas son un buen comienzo para su desarrollo.
Ayúdalos a superar los límites.
Los niños deben aprender a tener habilidades. Esto se logra explorando hasta dónde pueden llegar e impulsarlos a pasar ciertos límites. Si está aprendiendo a jugar con una pelota por ejemplo, incítalo a que juegue con la pelota en diferentes espacios; en una cesta, en el pasto o por medio de obstáculos. Ayúdalo a descubrir diferentes maneras de realizar actividades y muéstrale que siempre hay diferentes opciones.
Sé un modelo a seguir
Ser un ejemplo para tus hijos es una tarea difícil. Reconoce frente a ellos cuando te equivocas, de este modo ellos entenderán que lo que se hace mal tiene repercusiones y que las personas que se equivocan deben enmendar sus errores. Esto ayudará a formar su carácter y los hará ser personas responsables de sus actos.
Enséñales a ser auto suficientes en lo que hacen.
Ser independientes desde pequeños es algo que los hará sentirse fuertes y ayudara a su desarrollo emocional. Empezar a dejarles tareas sencillas como colocarse la ropa, o enseñarles a amarrarse los zapatos son acciones que los harán sentirse más independientes. De este modo aprenderán que pueden hacer las cosas y con el tiempo irán dándose cuenta que es importante aprender a valerse por sí mismos contando siempre con el apoyo de sus padres.
Siempre recuerda que es importante reafirmar su confianza con cada aprendizaje en sus diferentes etapas de crecimiento. Acompáñalo y comunícate con el todo el tiempo, entiende lo que necesita y ayúdalo a ser cada vez mejor.