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El agua forma parte importante de nuestro cuerpo, es responsable de casi dos tercios de nuestro peso corporal. Por otra parte, más de la mitad del agua en nuestro interior se encuentra en cada una de las células que nos conforman y el resto en otros lugares como vasos sanguíneos, tejidos y un espacio llamado intersticial.  

El componente de agua corporal es tan necesario para nuestra salud que varía de acuerdo con la edad. Los recién nacidos tienen un porcentaje mayor de agua con relación al de los adultos. De la misma manera, los requerimientos de agua de una persona, tienen relación con la rapidez o lentitud de nuestro organismo y los requerimientos energéticos diarios.

El agua también es necesaria para regular nuestra temperatura corporal y a mantener balance en todas las sustancias e interacciones químicas de nuestro cuerpo; dentro de la sangre el agua actúa como un medio por el cual se transportan diversas sustancias como proteínas, componentes del sistema inmune, hormonas entre otros.  

Cada persona debe tomar agua para reponer líquidos de acuerdo con la cantidad de energía que gasta y los alimentos que consume, por ejemplo un atleta que consume un alto número de calorías y que suda intensamente debe reponer líquidos en mayor medida que una persona sedentaria que no hace ejercicio.

Hablar de hidratación corporal también es hablar de salud, es por esto que conocer las diversas formas en las que perdemos agua nos ayuda a cuidar nuestra salud. Por ejemplo, no solo disminuimos nuestra cantidad de agua corporal en la orina, también lo hacemos cuando a través del sudor, la respiración y en diversos procesos metabólicos de los que no solemos ser conscientes.

Existe una necesidad natural de reponer los líquidos que perdemos a través de una adecuada hidratación, se estima que debemos beber cerca de ocho vasos de agua total en las bebidas (cuando somos adultos y nuestro cuerpo está en condiciones normales). En casos como el embarazo esta cantidad aumenta debido a que existe una circulación compartida con un bebé en formación.  

El agua en nuestro cuerpo no solo nos hidrata, también ayuda a mantener funcionando todos los mecanismos internos que lo componen y deben funcionar coordinadamente, como el sistema circulatorio, renal y digestivo. Incluso es necesaria para generar sustancias que son aparentemente simples pero muy importantes como la saliva e incluso ayuda a conservar la textura de nuestra piel.

Ahora que conoces esta información y la importancia del agua en el cuerpo humano, recuerda lo importante que es en tu vida, cuídala no la desperdicies y bebe la cantidad suficiente.