2018-07-11
Los dientes primarios y los definitivos son muy importantes, no solo para comer, también para hablar y sonreír. Sin importar si se trata de estructuras dentales transitorias o permanentes, debemos aprender a cuidarlos desde los primeros años.
Los niños empiezan a tener sus primeros dientes entre los primeros seis meses de vida y los 2 años, los primeros en salir suelen ser los del frente, luego los laterales, las muelas terminan de erupcionar antes de la pubertad. En total los dientes deciduales o de leche son 20, pues la boca aún no tiene suficiente espacio para albergar la dentadura definitiva. Los dientes de leche son piezas más blancas y muy resistentes.
El hecho de que se trate de dientes que serán reemplazados no quiere decir que los cuidados deban ser menos, pues los males en esta dentición pueden afectar las encías y generar problemas a futuro, por lo que es fundamental vigilar su estado se les debe enseñar a comer saludablemente y evitar los refrescos de azúcar procesada.
Se debe iniciar la rutina de cepillado de dientes desde el inicio de la dentición, al principio con un cepillo suave y especial para bebés, luego cuando ya puedan cepillarse solos y sean mayores, con productos adecuados para su edad, vigila que los niños aseen bien su boca y que tengan cuidado de no lastimar las encías ni comer crema dental.
Como padres es importante verificar mediante observación el estado de los dientes, si encuentras manchas, líneas, fracturas, daños en las encías, la lengua o la boca, signos de caries o dolor, es importante ir al odontólogo para buscar las causas de estos problemas que pueden ser tanto bucales como del sistema digestivo y en algunas ocasiones incluso pueden reflejar otros problemas.
Mientras los niños tienen dientes de leche, se recomienda enseñarles hábitos de cuidado oral a manera de juego: por ejemplo el cepillado dental, puede hacerse con un color de cepillo que le agrade, contando cada diente como cepillado y no cepillado o adivinando cuantos dientes ya se han cepillado o poniéndole nombres especiales al cepillo y los implementos de aseo. Se le debe comentar que el exceso de dulces es perjudicial y que puede desarrollar caries, si tienen una higiene dental deficiente.
Cuando los dientes de leche están muy flojos Se les debe explicar a los niños que esto su caída o desprendimiento es natural, esto es para que no sientan temor y explicarles que después de los dientes de leche crecerán unos permanentes que no tienen reemplazo por lo que se deben cuidar aún más.
Los dientes de leche se empiezan a caer a los 5 o 6 años, y el proceso dura hasta los 10 u 11, a partir de los 6 años comienza a aparecer la segunda dentición y es recomendable adoptar nuevos hábitos de higiene bucodental permanentes como el uso de la seda dental y la visita odontológica según requerimientos de cada persona, mínimo debería hacerse una revisión anual.