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Para aumentar los músculos no basta con solo comer y hacer ejercicio en extremo. Es importante entender la relación entre el contenido graso y la masa muscular de nuestro cuerpo, ya que se genera de maneras diferentes. Muchos de los alimentos que consumimos diariamente cuentan con distintas cantidades de calorías, proteínas, carbohidratos y también grasas, por ello una dieta balanceada adecuada logrará los efectos que esperamos, si nuestra meta es aumentar la masa muscular.

La relación para aumentar la masa muscular es simple. Tienes que consumir más calorías de las que quemas diariamente. Pero hay que tener cuidado, la calidad en las calorías que se consumen hacen la diferencia. La ingesta de un contenido calórico extremo, conduce al aumento de la grasa corporal no de la masa corporal, por lo que se recomienda que el aumento de calorías sea entre 300 y 500 calorías diarias.

Se debe lograr un equilibrio perfecto entre las calorías que se convierten en masa muscular, y las que se convierten en grasa ya que no quiere decir que todo el volumen que se agregue a la dieta se convertirá en masa muscular, siempre habrá una porción que se convertirá en grasa. Por eso se recomienda consumir proteína natural, ya que es el único macronutriente capaz de estimular el crecimiento muscular. Según los expertos, consumir hasta dos gramos de proteína por kilo de peso 3 veces al día, asegurará una absorción suficiente para apoyar el crecimiento muscular.

Entrenar intensamente es un factor clave.

Los músculos deben sentir la amenaza externa para reaccionar, ya que el cuerpo siempre va a estar preparado para protegerse a sí mismo. Cuando se hace ejercicio el cuerpo tiene la misma reacción que cuando se tiene una herida, pero en diferentes dimensiones. Si usted se corta una mano, el cuerpo reacciona y cubre esta herida con una costra más fuerte. A nivel muscular ocurre lo mismo. Cuando se realiza un ejercicio fuerte e intenso, los músculos sufren pequeños micro desgarres que obligan al cuerpo a actuar de manera inmediata. Por ello comer después del entrenamiento es también una de las formas más recomendadas para desarrollar masa muscular, siempre y cuando los alimentos sean los adecuados (proteínas y carbohidratos), ya que se absorbe más rápido y se genera este nuevo tejido que ayudará a que el cuerpo esté preparado si vuelve a suceder.

 

Descansar también ayuda a hacer crecer los músculos.

Los músculos necesitan reponerse después de una dura e intensa jornada de entrenamiento. El proceso en el que los músculos adquieren este nuevo tejido no es inmediato. Aunque se quiera lograr resultado en menos tiempo, también es importante tener estos resultados sin contraindicaciones. Los músculos que se trabajan en un día de entrenamiento no deben ser el mismo del siguiente día, deben tener por lo menos 48 horas de reposición para volver a ser trabajados. Si se realiza ejercicio de manera continua a los mismos músculos, lo que se logrará es un desgastamiento de los mismos que puede traer complicaciones para la salud. Descanse un día a la semana del ejercicio, consumiendo a su vez menos cantidad de proteínas y carbohidratos y dele a su cuerpo el espacio para reconstruirse y prepararse para el siguiente entrenamiento. De esta forma usted notará el crecimiento de sus músculos de una manera saludable, sin un esfuerzo diario y con mejores resultados.

Por último no olvide consultar al médico, es importante los controles para saber cómo se encuentra su cuerpo y escuchar las recomendaciones que tenga para usted, en cuanto a alimentación y jornadas de entrenamiento. Recuerde que no todos los cuerpos funcionan igual y que actúan de forma diferente.